Al ingresar, los clientes se encuentran con un ambiente sencillo y acogedor. Las mesas son de madera, y la decoración es modestamente marinera, en línea con el nombre del local. El lugar tiene capacidad para varias personas, lo que es ideal para grupos familiares o amigos que buscan disfrutar de una comida juntos.
En el menú, destacan las picadas tradicionales, que incluyen mariscos y carnes. Sin embargo, los comensales han mencionado que la calidad de la comida no siempre es constante. Algunos platos, como las empanadas de mariscos, han recibido elogios, mientras que otros, como los fritos, no han cumplido con las expectativas.
El servicio también ha sido objeto de crítica por parte de algunos visitantes. La atención puede ser algo lenta, especialmente durante los fines de semana. Sin embargo, hay quienes valoran la amabilidad del personal, que intenta hacer que la experiencia sea lo más agradable posible.
El horario de atención de El Ancla es de lunes a domingo, de 12:00 a 22:00 horas. Esto permite a los visitantes disfrutar de sus almuerzos y cenas en un ambiente relajado. Un detalle importante es que el lugar cuenta con estacionamiento, lo que facilita la llegada de los clientes.
A pesar de las críticas, El Ancla sigue siendo un punto de encuentro para quienes desean probar comida local en Puchuncaví. Su ubicación ofrece vistas al paisaje chileno, añadiendo un atractivo adicional a la experiencia.
CÓMO LLEGAR AHORA
LLAMAR:
Dirección: Pje. Miramar 2, 2500299 Puchuncavi, Puchuncaví, Valparaíso, チリ
Horario de El Ancla
Opiniones de El Ancla
El Ancla es una picada reconocida en la costa chilena, famosa por ofrecer una variedad de platos de pescados y mariscos, además de opciones para quienes prefieren carne o pollo. En teoría, el lugar promete una experiencia gastronómica enriquecedora, con un menú que incluye ceviches, paila marina y empanadas, todo ello en un entorno que invita a disfrutar de la vista al mar.
Al visitar El Ancla, decidí probar varios de sus platos. Pedí el jardín de marisco, que venía con ceviche de salmón ahumado, y la trilogía de ceviches. Sin embargo, la experiencia fue decepcionante: la comida carecía de sazón y los sabores eran insípidos. Las empanadas, que fueron otro inicio, estaban escasas de relleno y las papas fritas parecían pre fritas, lo que hacía que la calidad no justificara el precio. A pesar del esfuerzo por disfrutar, me sentí insatisfecho con la elección.
En cuanto a los precios, considero que son excesivos para la calidad ofrecida. La cuenta para tres personas ascendió a unos 80 mil pesos, lo que me pareció desproporcionado, especialmente considerando que los platos no cumplían con las expectativas. El ambiente del lugar es agradable, con una hermosa vista de la bahía, especialmente desde la terraza del tercer piso. Sin embargo, esta vista no compensa la falta de atención y la actitud desmotivada del personal, que hizo que la experiencia fuera aún más frustrante. Aunque se puede disfrutar de la caleta de Horcón, el mal servicio y la calidad mediocre de la comida me llevan a concluir que no volveré a El Ancla.











